La esperanza de un reencuentro

Capítulo  1
 Donde todo comenzó

''Un mundo nace cuándo dos se besan''
Octavio paz

Todo ocurrió luego que Ethan se casara con Charlotte, fue un día 10 de noviembre de 1939, pasaron su luna de miel en Marsella, una de las mejores ciudades de Francia,  pasaron ahí 10 días, luego regresaron a París donde Ethan había comprado una casa con todos sus ahorros.

Era un día cómo cualquier otro, Ethan tomaba una taza de café y leía la portada del periódico mientras que Charlotte preparaba el desayuno para que Ethan comiera y luego se fuera a su trabajo, habría un silencio total si no fuera por el sonido que el sartén emitia, ya que Charlotte estaba cocinando un par de huevos fritos y dos rebanadas de tocino. Ethan pasaba las páginas de su periódico, de pronto rompió el silencio y dijo a Charlotte -Parece que alemania quiere levantarse contra Polonia- Charlotte le respondió con un gesto indiferente -Son solo mentiras no lo creas, los periódicos solo buscan atención-
-no creo, todos hablan de eso últimamente- respondió Ethan -Bueno, cada loco con su tema- dijo Charlotte mientras le servía el desayuno a su esposo  -Si, tienes razón- dijo Ethan,
-Y ¿cómo te va en tu trabajo?- preguntó Charlotte para desviar el tema
-Pues no sé como estarán las cosas, ya pasaron diez días desde que no voy, fue una luna de miel muy larga la nuestra-  respondió Ethan, a lo que Charlotte le dijo -Pero no me vas a negar que fue la mejor-
-Pero claro- Dijo Ethan -Como olvidar esas diez noches, eres una fiera- continuó diciendo.
-Cállate- dijo Charlotte y le dió un puñetazo amigable en el hombro a Ethan mientras se reía.
Ethan terminó de comer, se cepilló los dientes tomó su portafolios, le dió un enorme beso a Charlotte y se fue -Nos vemos en la noche amor- dijo Ethan -Hasta luego- respondió Charlotte

Capítulo 2
Miel sobre ojuelas

''¿qué es poesía?, dices mientras clavas en mi pupila tu pupila azul ¡que es poesía! ¿y tú me lo preguntas? ¡poesía eres tú!''
Gustavo Adolfo Bécquer

El día había pasado rápido, Ethan llegó cansado del trabajo, Charllote le recibió en la puerta de la casa -Bienvenido amor- Le besó, tomó su portafolios -Sientate a la mesa, te serviré la comida- dijo Charlotte
Ethan hizo caso a lo que su esposa le había dicho, Charlotte no tardó ni 3 minutos en venir con la cena lista se la puso en la mesa a Ethan, haló una silla y se sentó con él,
-¿qué tal tu día?- preguntaron ambos al mismo tiempo
como por inercia se rieron de lo que había pasado
-dime tu primero, ¿cómo te fue?- dijo Charlotte
a lo que Ethan respondió -no muy bien que digamos, cuando llegué a la oficina todo era un caos, papeles en desorden por un lado, tuve que ordenar los archivos por orden alfabético denuevo, ¿recuerdas el caso de la Sra. Juliette? pues habían extravido todas las pruebas que teníamos, además de eso el Sr. Sebastian llegó a pedir defensa por su hijo que lo encontraron borracho molestando a los vecinos, no puedo faltar diez días porque la oficina se vuelve un desastre completo- 
-Vaya, si que ha sido duro, en comparación con el tuyo mi día no ha estado tan mal, lo de siempre, salir a arreglar el jardín, hacer la limpieza, la cena, lo de normal.- dijo Charlotte.
-Que bien amor, almenos tu si has tenido un buen día, pero la oficina regresará a la normalidad ya lo verás-  dijó Ethan con un tono cansado, a todo esto ya había terminado de comer.
-Amor ¿por qué no te duermes ya? necesitas descansar, yo iré a lavar los trastos y subo en un momento- dijo Charlotte
-si mi vida, está bien, iré a dormir- dijo Ethan mientras se levantaba de la mesa, estaba más dormido que despierto, pero con esfuerzo logró llegar a la cama.
Charlotte no tardó mucho en llegar, pero Ethan ya estaba dormido, Charlotte le besó la frente y se acostó a su lado y se durmió.